domingo, 11 de enero de 2009

EL ESPACIO PUBLICO, FACTOR CLAVE PARA CREAR LAZOS COMUNITARIOS



Las organizaciones comunitarias, principalmente las Juntas de Acción Comunal (JAC) y las Ligas de Consumidores, antes de lanzar campañas cívicas y sociales pueden primero sensibilizar a sus afiliados mediante actividades lúdicas, recreativas y culturales, recuperando los parques como espacios públicos ideales para la re-socialización. Es común en nuestro medio que casi nadie conozca siquiera el nombre de sus vecinos de al lado, lo que propicia la inseguridad y la insolidaridad. Las familias limitan sus intereses a lo que ocurre del portón para adentro, algunas a causa de un miedo atávico y al profundo desconocimiento de su entorno. Otras, consideran que tienen demasiada alcurnia para interesarse por cuestiones "triviales" y de poca monta como un sumidero obstruído, una zona verde enmalezada, o una iluminación pública deficiente. En consecuencia, lo prioritario es crear el clima previo de confianza y camaradería necesario para el éxito de programas, campañas e iniciativas comunales. Antes de quejarse de la apatía, la indiferencia y la falta de colaboración ciudadana, los directivos de las JAC y demás organizaciones, podrían colocar en primer lugar la recuperación de sus parques para sensibilizar, motivar y atraer a los ciudadanos en el propósito de mejorar la calidad de vida de su sector. El parque es el espacio que aglutina, que nuclea, que propone el encuentro, es una presencia del verde oxigenante en el barrio. La recreación es el medio para recuperar la capacidad de expresión, de comunicación y de organización. He aquí algunas sugerencias para hacer de los parques un sitio de re-encuentro, empezando con los niños, para así sensibilizar al resto de la comunidad :


TEATRO DE TÍTERES para niños entre uno y diez años de edad. Por ejemplo, Los cuentos de Tío Conejo que integrarían con imaginación la tradición oral, con las flautas y tambores de la música folclórica latinoamericana y la animación de muñecos. Habría una introducción o ambientación previa a cargo de zanqueros con banderas de colores vivos y animadores disfrazados. El valor didáctico interactivo de los títeres y marionetas todavía no se ha dimensionado suficientemente. No hay que olvidar que junto a los pequeños asistiría un público variado en edades, niveles culturales, oficios y profesiones, pero desde la persepectiva del niño que vive latente en cada uno de nosotros.


  • LA HORA DEL CUENTO podría ser la institucionalización de un día a la semana para que los cuenteros despierten la imaginación de grandes y chicos, y ya se ha dicho que la imaginación es más importante que el conocimiento.

  • TALLERES DE PINTURA INFANTIL. No se trataría de concursos para escoger el trabajo "más bonito" pues todos tendrían el mismo valor y al final del taller se elaboráría un mural para exhibir todas las pinturas. Se enseñaría a los niños a identificar y mezclar los colores básicos, usando crayones, témperas, acuarelas y pintura dactilar con vinilos vegetales, no tóxicos.

La idea central es dejar más espacio a la espontaneidad creativa, a la libertad, a la fantasía, a la capacidad de manifestar ternura y solicitud. Ello permitirá recomponer el tejido social y abonará el terreno para variadas iniciativas de participación ciudadana.

Respecto de las sedes comunales, valiosos espacios públicos, podrían utilizarse para charlas educativas semanales o quincenales, dictadas por profesionales en cada área, sobre los temas que interesan al consumidor-ciudadano, como por ejemplo:
  • Derechos y deberes del consumidor (conferencia que brinda FUNDECONSUMO).
  • Nutrición.
  • Seguridad alimentaria.
  • Reciclaje.
  • Economía del hogar.
  • Prevención en salud.
  • Prevención de tabaquismo, drogadicción y alcoholismo.
  • Orientación al adulto mayor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario